Este tipo de traducción, también conocida como certificada, tiene un carácter oficial y ha de llevarse a cabo por traductores debidamente nombrados por la institución pertinente.
Estas traducciones se entregan impresas, con la certificación, firma y sello del traductor. Algunos ejemplos:
- Títulos y expedientes académicos
- Certificados médicos
- Documentos del Registro Civil
- Certificados de antecedentes penales
- Sentencias de divorcio
- Poderes notariales y otros documentos legales
- Otra documentación necesaria para el proceso de visados o la obtanción de permisos de trabajo
La interpretación jurada se utiliza igualmente para trámites públicos u oficiales, tales como la firma y legalización ante notario de documentos públicos (escrituras o poderes notariales), cuando el otorgante o signatario no habla con fluidez el idioma en cuestión.
Hasta la fecha, mis traducciones juradas han sido aceptadas por todas las instituciones oficiales en las que se han presentado, y también pueden ser refrendadas por la Embajada de España si fuera necesario.